A mi amor que se fue…
Espero que al escribir te no cause sorpresa, ya que lo único
que quiero es poder manifestar algunas cosas que por los motivos que conoces no
se ha podido hacer de manera más personal, quisiera comenzar por decirte que
como siempre te he dicho nunca quise ni he querido que las cosas se vean como
si fuera una competencia donde hay que buscar un culpable cuando algo sale mal,
siempre quise darte de mí lo mejor, lo más profundo y lo más sincero.
Si en alguna oportunidad mis palabras fueron fuertes fue
porque era necesario hacer que entraras en razón, quise que aprendieras y
aprender al mismo tiempo, y sé que algo te dejó
después de todo, sé que te preguntaras que paso con todo ese sentimiento
que en más de una oportunidad nos expresamos, ese sentimiento que sería mentira
el decirte que ya no está, son cosas que no se cambian ni se borran de la noche
a la mañana, pero no es el sentimiento el único factor primordial en una
relación, tu mejor que nadie sabes que fueron muchas las cosas que me hiciste
en oportunidades diferentes, cosas que me causaron un terrible dolor y que
pensando en ese sentimiento avale la razón de seguir adelante, pero fue inútil,
ya que mientras más andábamos más nos adentrábamos en un viaje sin retorno, un
viaje que nos llenaba de cosas amargas y muchos sinsabores.
Sé que me toco a mi asumir la responsabilidad de dejar las
cosas así y hoy en día tomar decisiones fuertes, pero no me importa porque de
no haberlo hecho así, y de haber continuado las cosas como eran, al final de
todo no hubiéramos hecho demasiado daño y es lo menos que quiero y si estoy
consciente, pero más adelante el daño podría ser más grande, más fuerte y eso
no lo quiero, hay infinidades de recuerdos, detalles y muchísimas cosas más que
me unen a ti y que nunca olvidare, cosas que nunca nadie entenderá, porque
fueron construidas por nosotros dos y solo tú y yo sabemos entenderlas, no
quisiera que quedara en mi un mal recuerdo, un trago amargo, que cuesta mucho
tragar, más bien voy a guardar lo bonito, voy a guardar a la mujer, que siempre
lo será, porque para mi nunca existirá otra mujer como tú, ese lugar te lo
ganaste tú, y será tuyo para siempre, todo lo que te di de mí en este tiempo te
lo entregue desde lo más adentro de mi ser y si te lo di es porque es tuyo y siempre
lo será, cada detalle, cada caricia, cada palabra, el más mínimo de los gestos
y hasta las más intensa intimidad, en cada uno de esos momentos me entregue a
ti de tal manera que solo eras tú la que se encontraba entre mis venas.
Espero que el recuerdo mutuo sea bello y que algún día
podamos ser verdaderos amigos, eres una mujer extraordinaria, pero sigue
adelante, la vida te depara muchas cosas bellas y gratas y ten presente lo que
siempre te dije cuando todo esto empezó, “Aun cuando las cosas algún día
acaben, siempre estaré ahí” …Besos mi cielo, te deseo lo mejor de esta vida,
lástima que todo se terminó así.
Quien te ama más de lo que tu imaginas.
Yo….
UFFF...QUE TRISTE
Maruesva.